“¡Oremos en Cuaresma!”
A partir del miércoles de ceniza; entramos en el tiempo de Cuaresma. Es un tiempo de oración. Una oración que se nutre con la escucha de la Palabra de Dios y conduce a la conversión. El sacramento de la Reconciliación es también un instrumento especial.
Lo esencial de la oración es el encuentro con el Señor.. La oración es un encuentro en profundidad con Dios.
Las oraciones, las plegarias, los salmos, el Santo Rosario... son medios para el encuentro con el Señor. Lo importante es llegar al fondo de nuestra relación con Dios, abrimos enteramente a El para que El pueda habitar plenamente en nosotros, hablar con El, dialogar con El. Presentarle nuestras necesidades, exponérselas, abandonarnos en El confiadamente. A veces con insistencia, siempre con confianza, buscando sobre todo, su voluntad.
La oración nos aporta a Dios mismo, y con Dios en nosotros, a nuestro lado, todo lo podemos. Teniendo a Dios en nuestra alma, vamos cambiando nosotros, nos convertimos, nos acercamos al modo de ser de Dios. La escucha del Evangelio, va penetrando en nuestra vida y tejiendo nuestro ser con los hilos, las palabras, que salen de la boca de Dios. Nos vamos haciendo paulatinamente como Jesucristo. "Procuraba lo más que podía traer a Jesucristo, nuestro bien y Señor, dentro de mí presente, y ésta era mi manera de oración "—dice Santa Teresa (V 4,7). Este podría ser el camino de oración y conversión de esta Cuaresma.
¿Cómo podemos orar esta Cuaresma?
Algunas sugerencias:
-Orar al levantarnos y acostarnos
-Rezar diariamente el Santo Rosario individualmente o en familia
-Hacer el Via Crucis diariamente o todos los viernes
-Recibir la Eucaristía
-Rezar el oficiodivino (Esta la edicion para laicos, Liturgia de las horas) o alguna parte,
A partir del miércoles de ceniza; entramos en el tiempo de Cuaresma. Es un tiempo de oración. Una oración que se nutre con la escucha de la Palabra de Dios y conduce a la conversión. El sacramento de la Reconciliación es también un instrumento especial.
Lo esencial de la oración es el encuentro con el Señor.. La oración es un encuentro en profundidad con Dios.
Las oraciones, las plegarias, los salmos, el Santo Rosario... son medios para el encuentro con el Señor. Lo importante es llegar al fondo de nuestra relación con Dios, abrimos enteramente a El para que El pueda habitar plenamente en nosotros, hablar con El, dialogar con El. Presentarle nuestras necesidades, exponérselas, abandonarnos en El confiadamente. A veces con insistencia, siempre con confianza, buscando sobre todo, su voluntad.
La oración nos aporta a Dios mismo, y con Dios en nosotros, a nuestro lado, todo lo podemos. Teniendo a Dios en nuestra alma, vamos cambiando nosotros, nos convertimos, nos acercamos al modo de ser de Dios. La escucha del Evangelio, va penetrando en nuestra vida y tejiendo nuestro ser con los hilos, las palabras, que salen de la boca de Dios. Nos vamos haciendo paulatinamente como Jesucristo. "Procuraba lo más que podía traer a Jesucristo, nuestro bien y Señor, dentro de mí presente, y ésta era mi manera de oración "—dice Santa Teresa (V 4,7). Este podría ser el camino de oración y conversión de esta Cuaresma.
¿Cómo podemos orar esta Cuaresma?
Algunas sugerencias:
-Orar al levantarnos y acostarnos
-Rezar diariamente el Santo Rosario individualmente o en familia
-Hacer el Via Crucis diariamente o todos los viernes
-Recibir la Eucaristía
-Rezar el oficiodivino (Esta la edicion para laicos, Liturgia de las horas) o alguna parte,
[Laudes]o [Vísperas]
-Oracion o adoración ante el Santisimo
Lo que importa es elegir alguna forma y llevarla a la práctica. Orar más en este tiempo de Cuaresma, tener una vida interior, de relación y encuentro con el Señor más intensa.
Que esta cuaresma digamos SI al llamado a la conversión, y que nuestra vida se transforme en vida de oración.
-Oracion o adoración ante el Santisimo
Lo que importa es elegir alguna forma y llevarla a la práctica. Orar más en este tiempo de Cuaresma, tener una vida interior, de relación y encuentro con el Señor más intensa.
Que esta cuaresma digamos SI al llamado a la conversión, y que nuestra vida se transforme en vida de oración.
5 comentarios:
Es, por esto, la Cuaresma es un momento para “reconocer en los pobres a Cristo mismo” (Mensaje Cuaresma 2008, 6) porque de esa manera estaremos haciendo lo que bien dijo el Maestro y que no es otra cosa que amar al prójimo como a nosotros mismos.
Nos con lleva, en ello, nuestra vida espiritual y, además, el resto de nuestro destino eterno y así lo deseamos Hermanas.Saludos cordilaes.
Hola, una sorpresa hoy cuando he visto en mi blog vuestra visita. Gracias por condederme el premio; visito muy amenudo vuestro espacio. Tiene mucha información y muchos enlaces. Es muy interesante y muy bueno.
Gracias, una vez más
Un saludo
Jose
Gracias por las sugerencias estan muy precisas, las tomaré en cuenta.
Importantes recomendaciones y mas si vienen de la mano de nuestra Doctora y Maestra de la Iglesia Teresa de Jesús. ¿Quién como ella para mostrarnos el camino de rosas y espinas para llegar al amado? Gracias por su post.
No sé si he hecho bien lo del premio, pues no estoy muy puesta en eso. Os ruego que paseís por mi blog para comprobarlo y ya me decís algo.
Muchas gracias
Jose
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