“Vivir eucarísticamente significa salir de las angustias de la propia vida y adentrarse en el horizonte infinito de la vida de Cristo. Quien busca al Señor en Su casa, no se preocupará tan sólo de hablarle de sí mismo y de sus preocupaciones. Empezará a interesarse de las preocupaciones del Señor. La participación cotidiana en el Sacrificio eucarístico nos arrastra, sin que nos demos cuenta, en la gran corriente de la vida litúrgica. Las oraciones y los gestos de la celebración litúrgica nos representan continuamente, durante el año litúrgico, la historia de la Salvación, y nos ayudan a entrar cada vez más en su sentido. Y el mismo Sacrificio va imprimiendo en nosotros el misterio central de nuestra fe, punto cardinal de la Historia de la Salvación, el misterio de la Encarnación y de la Redención. ¿Quien podría participar con empatía de espíritu y corazón en la Eucaristía sin venir atrapado por el espíritu de sacrificio, por el deseo de empeñarse con su vida y su existencia en la gran obra de Redención del Salvador?” (El Misterio de la Navidad)
“Este es sólo uno de los efectos que proceden del Salvador eucarístico: él nos tiende la mano cuando venimos a él, naturalmente de manera más poderosa cuando participamos en el Santo Sacrificio del modo que exige el sentido de este Sacrificio, es decir, cuando no sólo participamos y vemos y oímos, sino cuando nos co-sacrificamos, cuando nos entregamos totalmente a nosotros mismos: para llegar a ser transformados con y ofrecidos con: al hombre que se acerca con esta actitud al altar, el Salvador puede incorporarlo a sí de la manera más real, hacerle miembro de su Cuerpo, sarmiento en la viña del Señor.”
“Todo lo que necesitamos para ser recibidos en la comunión de los espíritus bienaventurados se contiene en las siete peticiones del Padrenuestro, que el Señor rezó no para sí mismo sino para enseñarnos a nosotros. Nosotros lo rezamos antes de la comunión, y cuando lo decimos sinceramente y de corazón, y recibimos la comunión con la debida actitud, aquella nos concede el cumplimiento de todas las peticiones: nos libra del mal, porque nos limpia de la culpa y nos da la paz del corazón, que quita el aguijón de los demás “males”, ella nos da el perdón de los pecados cometidos y nos fortalece contra las tentaciones; es el pan de vida que necesitamos cada día para ir creciendo y adentrando en la vida eterna; convierte nuestra voluntad en instrumento dócil de la divina; con esto instaura en nosotros el reino de Dios y nos da labios y corazón limpios para glorificar el santo nombre de Dios.”
“Y el Verbo se hizo carne. Esto se hizo realidad en el establo de Belén. Y se cumplió plenamente de otra forma: “El que come mi carne y bebe mi sangre tiene la vida eterna”. El Salvador, que sabe muy bien que somos hombres y que permanecemos hombres, que cada día tenemos que luchar con debilidades humanas, viene en ayuda de nuestra humanidad de manera verdaderamente divina. Así como el cuerpo terrenal necesita del pan cotidiano, el cuerpo espiritual necesita de un sustento duradero. “Este es el pan vivo bajado del cielo”. Quien hace de Él su pan cotidiano deja que se haga realidad cotidiana en sí mismo el misterio de la Navidad, de la Encarnación del Verbo. Y ese es el camino seguro para alcanzar el ser uno con Dios y para crecer cada día con mayor fuerza y profundidad en el Cuerpo Místico de Cristo.”
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6 comentarios:
Cristo está presente con su alma, cuerpo y divinidad en el Santísimo Sacramento del altar. Hermosa fiesta del Corpus Cristi. Saludos Dios te bendiga...
Queridas Amigas,
Les he dejado un premio en mi blog, pasen a buscarlo.
Un abrazo y que Dios les Bendiga.
hermosisima entrada. la he leido con atención recien hoy, y habiendo participado ayer de una celebracion hermosisima en el carmelo de aquí, de mardel.
un abrazo
Amigas,
como yo seguiré postiando, les dejo el enlace del premio se los dejaré acá, para que lo pasen a buscar o cualquier cosa porfavor diganme.
http://laflorylamariposa.blogspot.com/2008/05/premio-al-esfuerzo-personal_24.html
Si Ceremoniero es el regalo mas grande que Dios nos ha dado, tener a su hijo vivo entre nosotros y a veces no lo sabemos apreciar y andamos buscando quien sabe que por ahi.
Gracias por el regalito Joana.
Analia que regalo hermoso el que vivas tan cerca del Carmelo de Mar Del Plata, es hermosisimo y una gracia muy grande. Que lindo que lo sabes aprovechar.
gracias por esta entrada llena de informacion sobre esta gran mujer alemana que manifiesta que el amor a cristo nos libra de la muerte y que todo sacrificio por pequeñio o grande que sea tiene una gran recompenza
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